Construída por material de las ciudades mayas durante la conquista. Esa es parte de la historia de Mérida. Por lo menos cuando se trata de unos de los edificios más impresionantes. Y en esta ciudad hay algunos edificios impresionantes. Los españoles supuestamente fundaron la ciudad en el año 1542. Pero todavía es visible que el territorio anteriormente formaba parte de la civilización maya. Hoy en día nadie está tratando de esconder eso. La promoción, las decoraciones y las actividades dentro de y al rededor de Mérida aprovechan la historia, colonial y precolombina. Érase una vez…una de las civilizaciones antiguas más mitológicas e impactantes del mundo.
Ya saben – por el momento es un poco difícil viajar entre continentes, entre países vecinos y a veces hasta otras regiones de su propio país, sea en Europa, en las Américas o la mayoría del planeta. Se está abriendo poco a poco, pero con restricciones. Hasta ahora he visitado México, la tierra de mi esposa, cinco veces. Hace dos años tuvimos la oportunidad ir a la península de Yucatán, donde se ubica Mérida.
No hay duda; es una ciudad bonita. Y ofrece un montón de programas y actividades dirigidos a los visitantes de afuera. Supongo que hay aún más turistas en Cancún, ubicada a unas horas más al este. Nunca he ido allí – pero tengo una idea. Sin embargo, hay barrios en Mérida donde los hoteles se concentran, mientras los monumentos de significado cultural e histórico, también la actividad comercial se encuentran un poco más allá por el centro histórico. Se ofrecen guías por minibus o carruaje con caballos. Las empresas turísticas te llevan a otros lugares conocidos de la región; haciendas coloniales, playas caribeñas, naturaleza espectacular y – por supuesto – los monumentos mayas. Y sí, vamos a hablar más de eso en otro reporte. Yo y mi esposa Emilia llegamos un lunes en el mes de julio de 2018 y regresamos el viernes de la misma semana. Emilia, que vino aquí la primera vez de jóven, me había advertido que cuatro días obviamente no es suficiente para experimentar a todo, pero – ¿cuánto tiempo sería suficiente?
Iglesias espectaculares hay algunas. La catedral por la Plaza Grande cuenta con un crucifijo grande, sobre todo alto; según ciertos informes el más grande de México y posiblemente de toda América Latina. Hay museos también, pero por alguna razón no alcanzamos a visitar tantos de ellos esta vez.
Un monumento ubicado en un redondel se atreve de contar la historia del país por inscripciones, los nombres de todos los estados mexicanos y varios eventos de la historia ilustrados. El monumento parece popular para tomar selfies, eso es algo que nos enteramos inmediatamente. Aquí llegamos con uno de los carruajes y el conductor nos indica donde podemos cruzar, con el apoyo de un policía, para acercarnos al Monumento a la Patria, creado por en escultor colombiano, Rómulo Rozo e inaugurado en 1956.
¿Comida? ¡Sí, hay! Con variedad. Un chofer de taxi nos sugiere en camino del aeropuerto, que deberíamos ir a La Chaya Maya. Resulta que hay dos de ellos, solamente separados por unas cuadras. Uno de ellos tiene más carácter, un diseño aparentemente dirigido a los visitantes domésticos y extranjeros. Unas mujeres con vestidos mayas hacen tortillas en una mesa cerca de la nuestra. Mi esposa pide en plato llamado relleno negro, y de veras está bien negro. Si recuerdo bien, consta de pavo en una mezcla de chiles con ciertos ingredientes agregados para crear un color más oscuro de lo típico. Yo pido una cochinita pibil que se asemeja al fenómeno pulled pork, con hojas de plátano. Bien rico.
El otro restaurante con el mismo nombre resulta más ordinario en comparación; agradable pero menos interesante. Pero eso también parece bien manejado y popular. Fuera de eso hay una mezcla de cafés, cadenas internacionales como Chili’s y aún otros que ofrecen platos típicos de la región. En ese respecto, como en general, hay más para explorar en la próxima visita. Como ya indiqué anteriormente, cuatro días no alcanzan. Sin problema, uno podría quedarse por una semana o dos sin aburrirse. Solo es cuestión de tiempo. Y dinero. Y ausencia de pandemias globales…